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¿Quién descubrio la novocaína?
Fue el alemán Alfred Einhorn quién descubrió la procaína en 1905 al investigar una sustancia que resultase fácilmente usable por los soldados durante la guerra. La sustancia se patentó como novocaína. Heinrich Braun hizo popular entre los dentistas la sustancia a partir de 1907.
¿Cómo se descubrio la lidocaina?
En l a búsqueda de una droga sustituta, entre 1943 y 1946, Nissl Lofgren y Bengt Lundquist desarrollaron la Lidocaína, primera amida que se empleaba para anestesia regional.
¿Qué es y para qué sirve la procaína?
La procaína es un medicamento que pertenece al grupo de los anestésicos locales de tipo éster y está indicado en anestesia local por infiltración (dolor asociado a heridas, cirugía menor, quemaduras, abrasiones).
¿Dónde se inventó la epidural?
En 1932 el cirujano argentino Alberto Gutiérrez y el Dr. Tomás Rodríguez Mata fueron los primeros en recordar y en revindicar para Pagés la paternidad del método del la anestesia epidural.
¿Cuándo se inventó la epidural?
En 1921 el cirujano militar español Fidel Pagés (1886–1923) la desarrolló convirtiéndose así en el inventor de esta técnica, de acuerdo a la sociedad científica internacional.
¿Qué es la lidocaína y dónde actúa?
La lidocaína fue descrita como anestésico local. Es bien sabido que, como tal, actúa a través del bloqueo de canales de sodio de la membrana celular de neuronas periféricas sensitivas, impidiendo el movimiento de iones de sodio y potasio a través de los receptores del nervio y por lo tanto, la conducción nerviosa.
¿Qué tipo de medicamento es la lidocaína?
Lidocaína es un anestésico local tipo amida, perteneciente al grupo farmacoterapéutico N01B (anestésicos locales, excluidos dermatológicos). Mecanismo de acción: Lidocaína bloquea tanto la iniciación como la conducción de los impulsos nerviosos al disminuir la permeabilidad de la membrana neuronal a los iones.
¿Qué enfermedades se pueden tratar con terapia neural?
Está indicada para un amplio abanico de patologías, siendo las más recurridas las enfermedades cardíacas y circulatorias, el dolor crónico, las cefaleas y migrañas, el asma, la artritis, artrosis y lumbalgias, las otitis, faringitis, alopecia, y enfermedades de salud mental como las depresiones o el estrés.